Entre páginas y mitos

En un mundo donde las estrellas eran lámparas colgadas en el cielo por los dioses, y los mares eran el hogar de criaturas mitológicas, me encontraba perdido en un laberinto de estanterías repletas de libros antiguos. Cada volumen era un portal hacia un tiempo olvidado, donde los titanes luchaban contra los dioses en una guerra que sacudió los cimientos del universo.

Como uno de los tantos buscadores de conocimiento, me adentraba en ese santuario de saber en busca de respuestas a los enigmas que habían desconcertado a la humanidad desde tiempos inmemoriales. Entre las páginas desgastadas por el tiempo, los mitos cobraban vida una vez más, susurrando secretos ancestrales que habían sido enterrados bajo capas de historia y leyenda.
Mientras mis manos exploraban los tomos polvorientos, podía sentir la presencia de seres divinos y criaturas mágicas que acechaban en las sombras de las letras impresas. Cada libro era un tesoro, cada palabra un conjuro que evocaba imágenes de batallas épicas, amores prohibidos y viajes extraordinarios a tierras más allá de la imaginación humana.
En aquel laberinto de conocimiento, yo era solo un explorador más, sediento de sabiduría y ansioso por desentrañar los misterios que yacían ocultos entre las líneas de los libros. Cuando estaba a punto de hallar la respuesta que buscaba un agudo pitido me distrajo, como si el pitido borrara mi entorno, los polvorientos libros comenzaron a desaparecer. Era como si aquel sonido fuera tirando de mí, tirando y tirando, arrastrándome hasta que… hasta que me di cuenta de que acababa de sonar la alarma del despertador. Como si un balde de agua fría hubiera caído sobre mis hombros me deshice de los brazos de Morfeo para precipitarme en la realidad de mi cuarto. Resulta que para mí era tan intangible la delgada línea que separaba la vigilia del sueño que me costó un par de minutos darme cuenta que acababa de salir de un sueño. A mi lado Los mitos griegos de Robert Graves.
El resto fue cantar y coser, he soñado con mitos, me dije sonriendo y recobré el dominio de mi mundo. No hay mal que bien no venga, pensé y pienso, si a mí, que soy una lectora insaciable, un mito puede llegar a atraparme de esta forma es que la literatura y los mitos han creado una alianza ancestral que vale la pena explorar. Y a la acción me remito. Allá vamos.

Los mitos han sido una fuerza motriz poderosa en la literatura a lo largo de los siglos, dieron forma a narrativas que trascienden el tiempo y el espacio. Desde las antiguas epopeyas hasta las obras modernas, los mitos han tejido su hilo dorado a través de la literatura, impregnándola de un profundo sentido de significado, misterio y conexión con lo divino.

Pero, ¿qué es un mito? Te preguntarás.
Los mitos, en su esencia, son relatos simbólicos que exploran las complejidades de la condición humana, ofreciendo un lenguaje rico para comprender los aspectos fundamentales de la existencia. Desde la creación del mundo hasta las hazañas heroicas, desde las luchas entre dioses, que pueden entenderse también como una forma de cotejarlas con las luchas entre humanos, hasta las tragedias humanas que luego de Sigmund Freud conocemos como neurosis, psicosis, perversión como resultantes de los, y cito: (…)“conflictos y escisiones producidos en el aparato anímico”.
En resumen, los mitos son un reflejo de nuestras aspiraciones más elevadas, nuestros miedos más profundos, nuestros deseos primordiales, nuestras pasiones, ayudan a construir la percepción del mundo (espacio-tiempo). Establecen una realidad, un orden físico y metafísico para conjurar el caos y la incertidumbre al ofrecer una visión integradora del mundo. Explican los fenómenos naturales y facilitan una percepción de los mismos al relacionarlos con creencias y/o conceptos universales.

En la literatura clásica, los mitos griegos y romanos han ejercido una influencia inmensurable. Las epopeyas de Homero, como la Ilíada y la Odisea, están repletas de personajes legendarios como Aquiles, Odiseo y Héctor, cuyas hazañas y dilemas morales continúan resonando en la literatura contemporánea. La tragedia griega, con dramaturgos como Esquilo, Sófocles y Eurípides, ha explorado las profundidades del alma humana a través de mitos como el de Edipo, Prometeo y Medea, mostrando las consecuencias devastadoras de la arrogancia, la pasión descontrolada y el destino inevitable.

En la literatura medieval, los mitos cristianos han dado forma a obras maestras como La Divina Comedia de Dante Alighieri, donde los viajes del poeta a través del Infierno, el Purgatorio y el Paraíso están imbuidos de simbolismo religioso y alegorías inspiradas en la tradición bíblica y la teología cristiana. Del mismo modo, las leyendas artúricas han cautivado a generaciones de lectores con relatos de valentía, honor y traición en la corte del Rey Arturo, encarnando ideales caballerescos y explorando la naturaleza humana en un contexto ficticio como ficticio es todo contexto de cualquier mito.

En la literatura moderna y contemporánea, los mitos continúan ejerciendo su poderoso atractivo, aunque a menudo adoptan nuevas formas y significados. Autores como James Joyce en Ulises y William Faulkner en El sonido y la furia han reimaginado mitos antiguos en contextos modernos, utilizando técnicas narrativas innovadoras para explorar la condición humana en un mundo en constante cambio.

Los mitos en la literatura son mucho más que simples relatos del pasado; son una fuente inagotable de inspiración y significado, capaces de desentrañar los misterios de la existencia humana y de conectarnos con algo más grande que nosotros mismos. A través de los mitos, la literatura nos invita a explorar los rincones más oscuros de nuestra psique, a enfrentar nuestros demonios internos y a buscar la verdad más allá de las apariencias superficiales.
Los mitos han influido significativamente en una amplia gama de géneros literarios a lo largo de la historia. Aquí tienes algunos ejemplos de cómo los mitos han dejado su huella en géneros específicos por ejemplo: la Novela fantástica y de ciencia ficción donde los mitos y leyendas han proporcionado a los escritores una rica fuente de inspiración para crear mundos imaginarios, razas y criaturas fantásticas. Autores como J.R.R. Tolkien se basaron en mitos nórdicos y europeos para construir los mundos de El Señor de los Anillos, mientras que obras de ciencia ficción como Dune de Frank Herbert exploran temas mitológicos como el héroe elegido y las luchas cósmicas entre el bien y el mal.
En la Literatura contemporánea aunque los mitos antiguos ya no tienen la misma prominencia, todavía hay muchos ejemplos de obras que se inspiran en mitos y leyendas. Desde reinterpretaciones modernas de mitos clásicos hasta la creación de nuevos mitos y arquetipos, los escritores contemporáneos continúan explorando el legado de los mitos.

Margaret Atwood en Penélope y las doce criadas ha utilizado temas y personajes de la mitología griega y romana para crear una historia con visos contemporáneos. Narrada por la misma Penélope desde el Hades del siglo XXI, la novela reversiona los hechos de la Odisea y visibiliza y cuestiona violencias que antes eran aceptadas y avaladas: la esposa sumisa, la limpieza y el orden de la casa en mano de las mujeres, el rol del hombre autoritario dentro de una vivienda, y el acoso y los abusos de los hombres hacia las mujeres.
Muchos autores modernos reinterpretan y re imaginan mitos antiguos para adaptarlos a la sensibilidad y los temas contemporáneos. Por ejemplo, Circe de Madeline Miller vuelve a los mitos griegos contados desde la perspectiva de personajes femeninos, ofreciendo nuevas interpretaciones y reflexiones sobre temas como el poder, la identidad y la venganza.

American Gods de Neil Gaiman sigue a los antiguos dioses que han perdido su influencia en la sociedad moderna de Estados Unidos, compitiendo con las nuevas deidades modernas. Gaiman reinterpreta varios mitos y leyendas en un contexto contemporáneo.
El oráculo oculto de Rick Riordan, es la primera parte de la serie Las pruebas de Apolo que basado en mitología greco-romana y egipcia inventa las aventuras de Apolo, el dios del sol, quien es desterrado de Olimpo y enviado a la Tierra como un adolescente mortal.

Los mitos actúan como poderosos prismas a través de los cuales se refractan las preocupaciones, conflictos y aspiraciones de la sociedad actual. Los escritores los reinterpretan y reinventan, explorando temas universales desde perspectivas frescas y relevantes para nuestro tiempo, mientras desafían y cuestionan las narrativas tradicionales.
Los mitos, como reliquias del pasado, continúan resonando en la literatura contemporánea, y sirven como espejos que reflejan nuestras luchas, sueños y dilemas actuales, pero también como herramientas para desafiar y redefinir las narrativas establecidas.