Descripción
Considerada por buena parte de la crítica como la mejor de sus obras, en su primera novela se sitúa Miller en la estela de Walt Whitman y Thoreau para crear un monólogo en el que el autor hace un inolvidable repaso de su estancia en París en los primeros años de la década de 1930, centrada tanto en sus experiencias sexuales como en sus juicios sobre el comportamiento humano.
Saludada en su momento como una atrocidad moral por los sectores más conservadores –y como una obra maestra por escritores tan distintos como T.S. Eliot, George Orwell, Gore Vidal, Norman Mailer o Lawrence Durrell–, en la actualidad es considerada una de las novelas más rupturistas, influyentes y perfectas de la literatura en lengua inglesa.