Descripción
En el Manual de zoología fantástica, Borges recurre a testimonios donde se contienen descripciones mágicas que encarnan en figuras a veces míticas, casi verdaderas en ocasiones, con el afán de integrar un museo excepcional en cuyo recinto lo fantástico adquiere autenticidad a través de experiencias literarias, filosóficas y aun teológicas. Los textos bíblicos, chinos e hindúes, las representaciones de algunos místicos, los escritores medievales o del Renacimiento, y los sueños de poetas y novelistas modernos contribuyen a formar esta serie de animales irreales elegidos y vueltos realidad por su incisiva pluma.